Edema: qué es, causas y cómo reducir la hinchazón

¿Te has despertado con los tobillos inflados o con la cara más redonda de lo normal? Eso suele ser edema, o lo que los médicos llaman retención de líquidos. No es nada mágico, es simplemente agua que se queda atrapada en los tejidos.

Causas más frecuentes del edema

Hay varias razones por las que tu cuerpo retiene agua. La más común es una dieta muy salada; el sodio hace que los riñones guarden más líquido. Otros motivos incluyen:

• Problemas cardíacos: si el corazón no bombea bien, la sangre se acumula y arrastra agua.
• Enfermedad renal: los riñones no filtran bien, así que el líquido se acumula.
• Insuficiencia venosa: las venas de las piernas no devuelven la sangre al corazón y se forma hinchazón.
• Embarazo: el aumento de volumen y la presión del útero pueden provocar edema en piernas y pies.
• Medicamentos: algunos diuréticos, antihipertensivos o corticoides pueden causar retención.

Si notas que el edema aparece de repente, es muy importante descartar causas graves como problemas cardíacos o renales.

Cómo aliviar y prevenir la hinchazón

Para calmar la hinchazón puedes probar varios trucos simples:

• Reduce la sal: cocina sin añadir mucho sal y evita alimentos procesados.
• Eleva las piernas: si pasas mucho tiempo sentado, levanta los pies 10‑15 minutos varias veces al día.
• Usa medias de compresión: ayudan a que la sangre vuelva al corazón sin quedarse estancada.
• Ejercicio regular: caminar o nadar estimula la circulación y quema el exceso de líquido.
• Bebe agua: parece contradictorio, pero mantenerse hidratado obliga a los riñones a eliminar el exceso.

Desde el punto de vista médico, el tratamiento más usado son los diuréticos, como la furosemida (conocida como Lasix). Estos medicamentos aumentan la producción de orina y reducen la retención, pero solo deben tomarse bajo prescripción y control.

Si el edema persiste, empeora por la noche o viene acompañado de dolor, dificultad para respirar o cambios en la orina, agenda una visita al médico. Un profesional podrá valorar si necesitas estudios de corazón, riñón o un ajuste de tus medicamentos.

En resumen, el edema es una señal de que algo en tu cuerpo está reteniendo agua. Cambios simples en la dieta, la postura y la actividad física pueden marcar una gran diferencia. Cuando esos ajustes no son suficientes, la ayuda médica con diuréticos u otras terapias será la solución adecuada.